Son tantos los ejemplos en el mundo de empresas públicas que no cumplen un verdadero rol de empresas que uno diría que le hace una más, pero es que lo que esta sucediendo en La Paz no es más que el claro ejemplo de por qué el Estado no tiene que meterse a manejar empresas.
No digo que lo ocurrido con la tubería de Hampaturi no sea un accidente producto de las intensas lluvias, pero me pregunto si va a existir algún tipo de compensación hacia los usuarios perjudicados. Pues claro que no, porque al ser una empresa estatal no esta regulada y por ende no hay forma de que los usuarios puedan reclamar. De hecho me parece una barbaridad que los usuarios tengan que bloquear exigiendo que les solucionen el problema.
Por otro lado creo que es hora de evaluar si EPSAS ha hecho lo que la antigua empresa Aguas del Illimani no hacía que era dotar de agua a El Alto. Me da la impresión de que no, pero como la idea era nacionalizar por nacionalizar, nadie dice nada, o me equivoco?
Después de esto no quiero ni imaginarle lo que va a ser la Aerolínea Estatal BoA.
3 comments:
Lo de la nacionalizacion de Aguas del Illimani, fue solo slogan... la auditoria de Pozo y Asociados demostro que ellos nos debian 20 millones de dolares,sin embargo el Estado boliviano (es decri, todos nosotros), le pago a los accionistas 15 millones de dolares...
De lo que estoy seguro es que hay un ministro de Evo con aires de nuevo rico.
Y al final EPSAS que tipo de empresa es? Publica, mixta, cooperativa?
Estoy de acuerdo con los comentarios sobre EPSAS.
Me parece un absurdo que una empresa que cumple un rol tan importante no se encuentre regulada y que no se someta a multas, plazos de solución o resarcimiento a los usuarios.
Estoy también de acuerdo también con que el evento fue fortuito pero sé que existen seguros que cubren este tipo de eventos. Me sorprende cómo este tipo de empresas "estratégicas" tengan que esperar a que el TGN decida darles recursos para que puedan solucionar el problema.
Apuesto que una empresa privada (regulada) estaría en condiciones de dar una respuesta rápida y efectiva a este caso, muy al contrario de lo que puede ofrecernos la Empresa Pública Social de Agua y Saneamiento (EPSAS).
Creo que es un imperativo pensar la institucionalidad necesaria para proteger al consumidor de este tipo de riesgos, vengan de fuente pública o privada.
Si no me equivoco, la SISAB todavía tiene cierto rol regulador sobre EPSAS. Lo malo de ello es que termina siendo juez y parte.
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