Tuesday, January 29, 2008

EPSAS ahi estaps

Son tantos los ejemplos en el mundo de empresas públicas que no cumplen un verdadero rol de empresas que uno diría que le hace una más, pero es que lo que esta sucediendo en La Paz no es más que el claro ejemplo de por qué el Estado no tiene que meterse a manejar empresas.

No digo que lo ocurrido con la tubería de Hampaturi no sea un accidente producto de las intensas lluvias, pero me pregunto si va a existir algún tipo de compensación hacia los usuarios perjudicados. Pues claro que no, porque al ser una empresa estatal no esta regulada y por ende no hay forma de que los usuarios puedan reclamar. De hecho me parece una barbaridad que los usuarios tengan que bloquear exigiendo que les solucionen el problema.

Por otro lado creo que es hora de evaluar si EPSAS ha hecho lo que la antigua empresa Aguas del Illimani no hacía que era dotar de agua a El Alto. Me da la impresión de que no, pero como la idea era nacionalizar por nacionalizar, nadie dice nada, o me equivoco?

Después de esto no quiero ni imaginarle lo que va a ser la Aerolínea Estatal BoA.

Travieso Canciller

La mirada de los que “tienen” es esquiva, y refleja total desinterés en encontrarse con la mía. Saben que no tengo nada de lo que buscan, y su cordialidad está reservada para quienes agregan valor a su estatus, u ofrecen complicidad en la frívola búsqueda de encuentros carnales. Los que se dignan cruzar palabras, lo hacen para indagar a qué me dedico. Consciente de las consecuencias, y buscando el desprecio que me libere de su insípida curiosidad, contesto “a nada”. Me divierte cerrar puertas enchapadas en mediocre cotidianeidad y privilegio, porque la civilidad que guardan tampoco tiene para mí valor alguno.

La mirada de los que “no tienen” es también evasiva, y refleja fracaso. Su amabilidad está reservada para quienes puedan ofrecerles algo, su espíritu presto a sonreír cuando se cruzan con aquellos dotados de importancia. Buscan un empleo, mejorar su estatus, y tener las mismas satisfacciones que suponen tienen los demás. Quieren abrirse puertas, y aunque por dentro sienten el mismo desprecio, fingen cortesía. La ciudad arde de frustración y amargura, y la maldita necesidad de ser alguien se tropieza con la falta de empleos, mellando lo que queda de su frágil dignidad. Mientras, los que ahora degustan el seductor sabor del poder, piden a la gente que encuentre sentido a sus vidas con cada vez menos, y que desistan por siempre del egoísta deseo de “vivir mejor”.

Saboreo el desprecio, porque permite expresarme sin temor al castigo de los dueños del circo. Desapercibido camino más libre, ignorando sus ladridos silenciosos, y con estas líneas espero eliminar el riego de despertar su hipocresía. Prefiero inducir el mismo anonimato que me depara cuando dejo la patria en búsqueda del sustento que nuestra fértil tierra ha dejado de sembrar. Comparten mi destino los millones los bolivianos que prefieren las miradas evasivas de gringos o españoles, quienes también los desprecian por no ser uno de ellos.

“¡No los queremos!”, “¡No los necesitamos!”, espetaba Fidel cuando salieron los marielitos” de Cuba. Al menospreciar el éxodo masivo de bolivianos que se cansaron de las miradas evasivas que desprecian su ambición de ser y vivir sin depender de la caridad del Estado, el gobierno silenciosamente comparte el mismo sentimiento. Ignorados en su patria, y sujetos a la inepta esquizofrenia política de los nuevos dueños del poder, son demasiadas las familias que salen del país en búsqueda de empleo, encontrando con frecuencia abusos y gran desdicha debido a su estatus de ilegal.

El gobierno tal vez no piense igual que “los que tienen”, pero su desprecio es el mismo. Los que migran son menos bocas que el Estado debe alimentar, y más remesas que inyectar a la economía. Con idéntica indiferencia, el gobierno vuelca la mirada a quienes no añaden valor a su ingeniería social. Deben suponer que pueden mejor subvencionar una sociedad donde queden menos para no hacer nada”. Lo mío es un ardid, parecido al que a menudo nos juega el Canciller. La política de “arcas llenas sin empleo” ahora obligará al pueblo aprender a darse el mismo lujo, o intentar fugar.

Flavio Machicado Teran

Thursday, January 24, 2008

Turbulencia Económica

La actual coyuntura económica mundial amerita un par de reflexiones con respecto a los posibles efectos que ésta podría tener sobre la economía Boliviana.

Como todos han debido ver, leer y escuchar en las noticias, este lunes 20 de enero hubo un remesón importante en las principales Bolsas del Mundo, esto como consecuencia de la crisis Subprime en EEUU. Esta crisis se origina en los problemas de pago de créditos hipotecarios entregados a personas de alto riesgo. Por tratarse de créditos con mayor riesgo, el interés asociado es más elevado que en los préstamos personales y las comisiones de los bancos y entidades financieras son considerablemente mayores.

Por otro lado, como el mercado financiero norteamericano es altamente sofisticado y la deuda hipotecaria puede ser objeto de venta y transacción mediante compra de bonos o títulos de crédito, estas hipotecas subprime podían ser retiradas del pasivo del balance de la sociedad concesionaria transferidas a fondos de inversión o planes de pensiones.

El problema surgió cuando las entidades financieras desconocieron realmente el riesgo asumido y cuando se confió en que la sola plusvalía de la propiedad era garantía del pago de los compromisos adquiridos.

La crisis hipotecaria de este año se desató cuando los inversionistas lograron identificar señales de alarma: el alza progresiva de la tasa de interés impuesta por la Reserva Federal y el consiguiente aumento de las cuotas de estos créditos hicieron aumentar la tasa de morosidad y el nivel de ejecuciones.

A fin de paliar la crisis, la Reserva Federal, adelanto anteayer el recorte de tasas de interés y se espera que lo vuelva a hacer a fin de mes.

Como bien lo expresa mi amigo Mario de Palabras Libres, la pregunta es: ¿Cómo afecta esto a Bolivia? ¿Será que la tos de EEUU se traduce en un resfrió para nosotros?

Primeramente, me hubiera gustado escuchar ya sea al Ministro de Hacienda o al Presidente del Banco Central decir que por lo menos están preocupados y haciendo un seguimiento a la situación, pero creo que mas están preocupados en festejar los dos años de gobierno que de otra cosa.

Segundo, es difícil hacer predicciones cuando no se tienen a la mano ciertas herramientas como ser modelos macroeconometricos y de equilibrio general para hacer ciertas simulaciones, sin embargo algo se puede decir. Creo que no existe duda de que el ciclo económico expansivo que hemos estado viviendo esta llegando a su fin. Lo interesante es que ya no es EEUU la super potencia económica, también lo son China e India, así que la recesión que se viene en EEUU podría ser de alguna manera compensada por estas economías. En esto creo que ha habido una coincidencia entre los expertos que en estos momentos se encuentran en Davos (World Economic Forum)

Esto significa que los precios de los commodities podrían o no bajar. Me atrevería a pensar que los precios de minerales no bajen, pero si del petroleo, pues EEUU ante una recesión disminuiría sus compras de petróleo, lo que haría caer su precio. Eso obviamente nos beneficiaría, pues podríamos importar diesel y otros derivados a un precio más bajo. Los precios de los minerales pienso que seguirán altos por lo menos en este año, así que la minería no debería verse afectada y los proyectos de inversión en marcha deberían seguir adelante.

Por otro lado el hecho que la Reserva Federal siga bajando las tasas de interés es una clara intención de aumentar la liquidez en los mercados. Las bajas tasas de interés en EEUU y las mayores tasas en Bolivia, claramente harán que ingresen más dólares a nuestra economía con la consecuente apreciación del Boliviano. Al contrario de la mayoría de los analistas yo apoyo esta medida, pues no hay nada mejor que tener una moneda fuerte que nos permita avanzar hacia un esquema de Metas de Inflación en el manejo de la Política Monetaria.

Con respecto al crecimiento, puedo decir que las proyecciones para este año deberán ser revisadas a la baja, aunque es difícil predecir si esta baja será fuerte o leve. En un artículo se indica que Bolivia estaría entre los países menos afectados. Ciertamente por el volumen y tipo de comercio que tenemos con EEUU, la caída en nuestras exportaciones no debería ser muy fuerte. Pero esos son los efectos directos, los indirectos aún son un misterio, pues habrá que ver que pasa con nuestros otros socios comerciales.

Continuaré haciendo un seguimiento a estos eventos tan interesantes y reportando otras posibles consecuencias que podrían tener.

Inercia Política

Más nos acercamos a la luna, y la ley de gravedad parece transformarse, o incluso desaparecer. En la luna sigue siendo la misma la ley de la gravedad. Simplemente gobierna los cuerpos de una manera diferente a la que estamos aquí acostumbrados. Mientras permanezcamos bajo el manto atmosférico de la tierra, sin embargo, nos hemos de caer todos exactamente igual. Otro principio que pasa desapercibido es el de la inercia. Un objeto permanece en movimiento hasta que otro logra completamente detenerlo. Trágicamente, es el parabrisas quien muchas veces frena la ensangrentada cabeza del desafortunado pasajero, que no supo colocarse su cinturón de seguridad.

Los cinturones de seguridad salvan vidas. Es un aparato sencillo, pero eficiente, y cientos de miles las personas se arrepienten por no haberlo utilizado. Pero cuando nuestros usos y costumbres decretan que todo taxi y minibús debe ser destripado de cualquier mecanismo que ponga en duda la infalibilidad pericia de quien conduce, no importa la experiencia colectiva que acumula una sociedad, ni cuantas campañas o leyes se promulguen. La conducta seguirá siendo irracional.

Otro derecho extirpado de las silenciosas minorías, es el derecho a trabajar en un lugar libre de sustancias nocivas. Una reciente ley intenta regular el consumo de cigarrillos en lugares públicos, una costumbre muy contaminante que las grandes mayorías han impuesto sobre el resto de la población. Se supone que la ley ha de proteger a quienes no fuman. Podemos apostar, sin embargo, que nuestra acostumbrada discrecionalidad hará que se respete dicha disposición únicamente en oficinas públicas en las que el jefe no sea un fumador empedernido.

La ley se manifiesta de manera diferente mientras más nos acercamos a los círculos de poder. Mientras más poderosa sea la figura que afecta nuestra orbita gravitacional, mayor será su capacidad de ejercer sobre nosotros su dominio. Para entender la discrecionalidad que reina en Bolivia, no necesitamos referirnos a los entretelones en corredores palaciegos. El ejemplo banal aquí expuesto es del individuo que no puede ejercer su derecho a frenar su inercia sin ser lastimado, simplemente porque “aquí no se acostumbra” a utilizar cinturón. Parecerá trivial que cuando uno sube a un transporte público cuyo dispositivo de seguridad ha sido extraído, o debe trabajar en un ambiente impregnado por un manto de nicotina, pierde todo derecho a proteger su vida. No es inconsecuente, sin embargo, que debamos acostumbrarnos al peligro que las grandes mayorías nos imponen, y que para no ser acusados de “chantaje” debamos hacerlo sin chistar.

La agenda del gobierno es crear un Estado “fuerte”, que asuma por nosotros iniciativas, y controle la economía. Debido al imperativo político de hacer superior su razón de ser, en lugar de buscar equilibrar y limitar los poderes - delineando específicamente atribuciones y competencias - su agenda se enfoca en subordinar, y en controlar nuestros recursos. Por ende, mientras la consigna sea imponer un Estado todopoderoso, ningún debate, ley, mecanismo constitucional, o contrapeso, conseguirá en la práctica frenar su dominante inercia, y permaneceremos sometidos a su arrastre gravitacional.

Flavio Machicado Teran

Monday, January 21, 2008

Consejos para Avanzar

Después de dos semanas en las que supuestamente Gobiernos y Prefectos están dialogando, ya empiezan a sonar las voces que dicen que lo único que se esta haciendo es ganar tiempo, que se trata de un engaño, etc. De acuerdo a mi formación, por un lado los Diálogos no existen, lo que existen son Negociaciones y por otro lado están dialogando políticos, y por definición los políticos son mentirosos, así que no tengo muchas esperanzas.

Sin embargo, no se puede negar que de alguna manera el escenario de confrontación ha disminuido y podemos esperar el Carnaval con bastante tranquilidad. De hecho se vive un mes de enero bastante tranquilo. También, del supuesto Dialogo ha surgido una idea interesante y me parece que por ahí podría haber una salida y es la idea de conformar Comisiones. Esta práctica ha funcionado muy bien en Chile, justamente para conciliar posiciones entre Gobierno y Oposición. La pregunta es ¿Qué tipos se Comisiones? La respuesta: Comisiones técnicas formadas por profesionales de primer nivel.

Estas Comisiones serán cono el agente externo o imparcial que definirá el rumbo a seguir en temas claves para el futuro de Bolivia. Por ejemplo, pienso que la primera Comisión que debería formarse es una Comisión de Descentralización, que defina muy bien el esquema de descentralización que tomará Bolivia tomando en cuenta la descentralización Departamental. Esto significa completar el modelo ya existente de descentralización municipal con uno que tenga además descentralización departamental. Aquí el tema clave será definir muy bien el manejo fiscal. Por lo tanto esta Comisión deberá tener sobretodo economistas.

Otra Comisión deberá ser la Comisión de Pensiones. Esta Comisión deberá pensar en una reforma de pensiones en la que encaje el tema de la Renta Dignidad, pero dentro de un esquema completo de asistencia a la vejez y no como algo político. La Renta Dignidad es una gran cosa, pero debería estar dentro de un esquema completo de pensiones que toque también otros temas importantes como la jubilación de personas que por una u otra razón no cotizan, etc. También aquí deberá haber una importante presencia de economistas.

Finalmente una vez que se tenga claro el modelo de descentralización, recién se podrá pensar en modificar la Constitución y los Estatutos Autonómicos, de tal forma que ambos reflejen la visión de país que es factible de tener. Aquí habrá que llamar a los mejores abogados constitucionalistas.

Creo que esto sería lo óptimo y lo mejor que nos podría pasar. Sin embargo veo dos restricciones para que esto suceda. La primera es la referida a la voluntad política como para dejar que un grupo de intelectuales defina el futuro de la Nación y la segunda referida a de donde sacamos a estos intelectuales. Los países que han aplicado estas medidas los han sacado sobretodo del las Universidades. En Bolivia esto no se puede, pues las Universidades (publicas y privadas) solo cumplen el 50% de lo que una universidad de verdad hace. Aquí solo dan clases y no hacen investigación, por ende no tienen profesores que puedan aportar con ideas para el futuro de la Nación.

Paleo Ciegos

Una mujer no tiene la obligación de votar por una candidata de su mismo sexo, y un afroamericano no tiene que votar por quien tiene el mismo color de piel. Ello queda demostrado en la distribución de votos de Clinton y Obama en la primarias Demócratas. Las mujeres menores de 30 apoyan al carismático moreno y, en varios estados, los afroamericanos mayores de 50 se inclinan a favor de la choca antes mencionada. Cuando el sistema se adapta, perfecciona, y deja el individuo de sentirse discriminado, el voto puede ser por ideales, visiones, o capacidad de gobernar.

En las pasadas elecciones bolivianas hubo un voto castigo, de quienes estábamos cansados de un sistema partidista arrogante y basado en la exclusión. También hubo un “voto rehén”, de quienes temíamos que la victoria de un k’ara haría estallar el polvorín. El voto más importante, sin embargo, fue un voto por “uno de los míos”, y el pueblo se movilizó para apoyar a uno de su misma raza. ¡Perdón! Se me olvidaba. Una minoría votó por el decrepito modelo de Fidel.

La historia del siglo XX de Bolivia está marcada por el corporativismo caudillista, que permitió que las grandes masas apoyaran banderas revolucionarias llenas de consignas, y evidentes deficiencias en su proyección histórica y nacional. Líderes sindicales y campesinos fueron cooptados por el MNR, y por más de una dictadura militar. Las manipuladas masas apoyaron a líderes y movimientos porque su voluntad estaba capturada por estructuras orgánicas. Hoy eso está lentamente cambiando, y es precisamente a ese cambio que le temen en Cuba y Venezuela, cuyos gobernantes intentan como pueden controlar el acceso del pueblo al Internet.

Bolivia votó por el cambio, y no por el retroceso. El racismo ha hundido al país en un subdesarrollo, y esa es una factura que – con gran arrogancia e ignorancia - aún hay quienes se resisten en pagar o subsanar. Es un gran aporte histórico del Presidente Morales marcar el principio del fin de esta lacra social, y en esa tarea debería tener el apoyo de todos los bolivianos. La reunión con los Prefectos, sin embargo, es una pauta que las grandes mayorías en nuestro país no han apostado por un estatismo ineficiente, ni por la prepotencia y discrecionalidad de quienes coyunturalmente sustentan el poder.

El proyecto de Fidel tiene – a lo sumo – diez años más de vida. Solamente aquellos individuos hoy cegados por el poder – o el petróleo - pueden apostar a un futuro de tan corto plazo. El pueblo boliviano, discriminado y excluido, ha votado por uno de su misma raza. Pero dudo que haya votado por la destrucción del aparato productivo, o por el paternalismo estatal. La gente quiere justicia e igualdad, pero con empleos y desarrollo. Las voces dominantes hoy son de dinosaurios de la historia, incapaces de entender que su apuesta socialista tan solo logrará ventilar frustraciones, y hacernos perder valioso tiempo. Esperemos, por ende, que los representantes de las “grandes minorías ideológicas” sepan adaptar su paleo-ciego dogmatismo, y dejar de poner nuestra unidad y progreso en peligro de extinción.

Flavio Machicado Teran

Monday, January 14, 2008

Problema…Bis

En este post hago mención a otro problema que ya es recurrente todos los años y es el problema de la venta de ropa usada o de los denominados Ropavejeros. Al igual que el tema del SOAT es otro tema que otra vez aparece y es porque simplemente no se le da una solución inteligente y de largo plazo, sino simplemente se buscan “parches” coyunturales que lo único que hacen es “patear” el problema.

Y es que en realidad, la idea del gobierno de reconvertir a los Ropavejeros no es una solución creíble. Para que sea creíble o factible se tiene que demostrar que con la reconversión, los Ropavejeros van a ganar igual o más de lo que ganan vendiendo ropa usada. Me da la impresión que eso difícilmente va a suceder. Si uno se dio una vuelta por San Francisco en estas Navidades se da cuenta que el negocio de la ropa usada cuenta con una demanda que cubre a todos los estratos de la sociedad. De hecho pareciera que quienes más compran ropa usada es gente pudiente.

Como creyente que soy del libre mercado en temas comerciales (porque obviamente para temas sociales, el mercado tiene sus deficiencias) creo que la mejor solución y además verdadera sería dejar que los Ropavejeros hagan su negocio libremente y si realmente hay un perjuicio a la industria nacional, ahí pensar en algún mecanismo impositivo talvez que grave a la ropa usada. Pero, tratarlos de reconvertir a la fuerza no va a funcionar nunca. Por otro lado, aunque no tengo certeza de esto, me han dicho que Bolivia y en particular El Alto, exporta grandes cantidades de ropa al Brasil. Todas, esas bermudas que los turistas compran en las playas de Rio de Janeiro que dicen “Praia de Copacabana” son todas hechas en Bolivia. Si es así, de que nos preocupamos de la ropa usada?

Fuego Cruzado

Sin pronunciar palabra alguna, una jauría de lobos impone su jerarquía. Armados de mecanismos mucho más complejos, las jerarquías humanas suelen ser menos eficientes. Existe una gran diferencia, y es que los objetivos de los lobos son compartidos, y su unidad orgánica. Los humanos, en contraste, debemos integrar una gran diversidad de intereses y actividades que hacen a nuestra manada mucho más interesante, prolífica y agraciada, aún cuando más violenta. Consecuentemente, nuestras jerarquías suelen distorsionar nuestros propósitos, corromperlos y agraviarlos. Ello no quiere decir que debamos, o podamos, prescindir de la odiosa necesidad de estructurar la sociedad.

Sin legislar palabra alguna, el hombre impone sobre la mujer su jerarquía. No existe Constitución o Decreto alguno que especifique el valor de una mujer divorciada. Sin embargo, deben actuar con gran cautela aquellas mujeres hoy libres de un marido inservible, o correr el riesgo de ser estigmatizadas. Ello impone sobre la sociedad una gran ineficiencia, ya que hombres buenos, también divorciados, no pueden conocer a sus contrapartes femeninas, por estar ellas encerradas en casa cuidándose del “qué dirán”.

Algo similar puede llegar a suceder con nuestros empresarios. Habiéndose creado una jerarquía constituida por quienes fueron parásitos del Estado, la consigna ideológica de un sector radicalizado parece ser “estrangular” a todo quien digne llamarse “empresario”. Tal vez sea una sutileza semántica pero, ¿no sería más productivo plantearse el objetivo de desmantelar al feudalismo empresarial y agrícola que corruptamente se benefició del Estado? Por culpa de unos cuantos, estigmatizar a toda una clase que no tiene etnia, religión, ni propósito otro que no sea hacer empresa, me parece un gran desacierto histórico. Empresarios, después de todo, son también algunos comerciantes de la Sagarnaga que – al margen de sus propias “matufias” en la forma de evasión fiscal – hoy aportan al desarrollo nacional, al permitir que sus familias hagan empresa.

Ser empresario requiere de habilidades que no todos poseemos. Al margen de las buenas intenciones enmarcadas en nuestra nueva Constitución, y atizado el fuego por grupos radicales, corremos el riesgo de destruir nuestra capacidad productiva, en nombre de revertir la jerarquía anterior. Crear una sociedad más justa, donde aquellos que poseen la habilidad y conocimiento necesario – y no los señores feudales – hagan empresa, es un proyecto mucho más coherente, que simplemente eliminar toda desigualdad. Las jerarquías pueden ser odiosas, pero cuando bien articuladas, y cuando obedecen a una meritocracia, también pueden ser conducentes al bien común.

A su vez, pretender imponer la ley orgánica de la naturaleza, en nombre de eliminar la diversidad y complemento de funciones propia de ella, me parece una aberración conceptual. Debemos superar esta falsa dicotomía, y comprender que la dialéctica de nuestra evolución, gracias a la capacidad intelectual y libertad humana, permite un complemento entre competencia y cooperación. De lo contrario, el empresario boliviano – aquel que trabaja 14 horas diarias creando empleos y desarrollo - se verá bajo el fuego cruzado de una derecha sin ideología, que pretende recuperar sus privilegios, y una izquierda que sustenta la ideología del bien y el mal.

Flavio Machicado Teran

Monday, January 07, 2008

Repensar el SOAT

Algo que ya se ha hecho costumbre cada año, es que los chóferes se opongan a pagar por el Seguro Obligatorio contra Accidentes de Transito (SOAT). Al parecer los términos del contrato no están bien definidos, pues me parece muy lógico que la prima del seguro este en función de la tasa de siniestralidad y si esta ha aumentado, entonces claramente los chóferes deberían pagar más.

Sin embrago hay algunos elementos que sería bueno repensarlos. Uno de ellos es justamente si el SOAT está generando los incentivos correctos. La lógica de este seguro indica que si aumenta la siniestralidad, la prima sube y por ende la precaución aumenta y así la siniestralidad baja. Al parecer en los años que ya lleva este seguro, esta lógica no ha funcionado y mas bien ha generado incentivos perversos en el sentido que mas bien, los chóferes al saber que tienen un seguro, toman menos precauciones. Esto es lo que en economía se llama Riesgo Moral.

Para estar seguros que evidentemente hay problemas de Riesgo Moral, habría que analizar cuantos accidentes responden a fallas o irresponsabilidades humanas y cuantos a fallas de la movilidad. Pienso que muchos accidentes ocurren por fallas de la movilidad y ahí hay una responsabilidad directa de Transito que si bien hace inspecciones anuales a los vehículos, todo el mundo sabe que ésto de inspección no tiene nada. Solo verifican si funcionan las luces y listo.

Por tanto, el mecanismo del SOAT debe ser repensado de una manera conjunta y pensando ante todo en el consumidor, que es el que al final paga las consecuencias de los accidentes. Por otro lado y aprovechando que el Estado tiene plata, se debería pensar en dotar a la Policía de helicópteros ambulancia. Es una vergüenza que en pleno siglo XXI se siga socorriendo a los accidentados en taxis.

Post Tribalismo

Muy probable la próxima cabeza del “imperio”, Hillary Clinton tiene un dilema con el cual me identifico. Nacida en Illinois, pero senadora por otro estado, admite no saber si apoyaría en una final a los Cachorros de Chicago, o a los Yankees de Nueva York. Su predicamento ha alimentado los ataques de la derecha, que utiliza su “ambivalencia tribal” para acusarla de ser incapaz de tener una firme y clara posición. Aparentemente, aun en países supuestamente tolerantes de la diversidad, todo individuo debe arraigarse a una identidad que lo defina. Por ende, quienes no somos viscerales defensores de un color, somos acusados de padecer la vergonzosa enfermedad del postmodernismo.

Desarraigado de mis raíces culturales, y criado en el Caribe, en lugar del futbol, yo soy fanático del basquetbol. A su vez, me he (o me han) “intersubjetivizado” al proyecto de la NBA, que pretende globalizar la liga, promoviendo estrellas de todo el mundo. La estética, profesionalismo y nivel de la NBA es del más alto. No es suficiente para mí, sin embargo, observar un gran partido, y para disfrutar del campeonato necesito invertirme emocionalmente con un equipo, el cual elijo después de observar su dinámica, ética de trabajo, garra y espíritu. Los equipos cada año cambian, se renuevan, o se deteriora su capacidad de trabajar juntos. Después de todo, son seres humanos los involucrados, y ello garantiza drama, sudor y lágrimas. En todo caso, puedo darme el lujo de tener como favoritos a seres humanos, y ser “fan” de la dinámica que los acompaña, y no así ser prisionero del fetiche y obligación de tener que rendirle culto y tributo a una camiseta.

En la liga profesional de futbol boliviano hay un gran proyecto, y consiste en transformar en empresa a lo que fue un club. La proyección de negocio es grande, y obedece a un plan de hacer al Bolivar una empresa rentable y competitiva. Los demás equipos ahora deberán tomar una decisión: seguir haciendo las cosas según nuestros usos y costumbres, o adaptarse a una nueva manera de elevar el nivel competitivo de nuestro deporte. Yo, originario estronguista, y rayado de por vida, tal vez no pueda darme el mismo lujo que me doy con los diferentes equipos de la NBA, a los cuales - porque en su momento allí jugaban aquellos seres humanos a quien he admirado por su estilo y pundonor - he brindado mi amor postmodernista. Ello no quiere decir que no considere positivo que el Bolivar alcance un nivel superior de competitividad, y que no celebre el que ahora obligue a todos los demás a superarse.

En el futbol español, la rivalidad entre el Real Madrid y Barcelona raya en un odio tribal. Existe un gran resentimiento, que tiene como antecedentes los vanos intentos de Franco de borrar por siempre el idioma catalán. El lujo de odiarse tal vez pueden dárselo ellos, que tienen la liga más importante del planeta y un mercado europeo, lo cual permite subvencionar su regionalismo. Nosotros no. Y si a Hillary Clinton se le fustiga su carencia de fundamentalismo originario, mis compañeros estronguistas seguramente cuestionarán que le desee al Bolivar fortuna y éxito en su nuevo proyecto. Que me disculpen ellos, pero espero que el Bolivar haga una gran empresa, una revolución bolivariana “Hecha en Bolivia” que yo si puedo celebrar.

Flavio Machicado Teran

Wednesday, January 02, 2008

No-Free-Lunch

Una de las propiedades microeconómicas básicas en la teoría de la empresa es lo que se conoce como la propiedad de “No-Free-Lunch” que traducido al español significaría “No Almuerzo Gratis”. Lo que esta propiedad indica es que no es posible producir algo de nada. Y llevada a la vida cotidiana nos dice que nada es gratis en la vida.

Talvez la noticia más relevante en lo que fue esta semana de Navidad y Año Nuevo, fue la esperada liberación de los rehenes por parte de las FARC y que al final fue un completo fracaso porque justamente esta “operación” no tenía absolutamente nada de humanitaria. Era simplemente una entrega de rehenes a cambio de algo, quien sabe que. Porque repito, nada es gratis en economía y menos en la política. Por lo tanto si la operación fallo es porque la negociación fallo.

Es una pena que esto haya ocurrido, pues las familias de los rehenes se habían hecho muchas esperanzas y al final no se concreto y eso es muy triste. Por otro lado me alegra que el show montado por el gobierno de Venezuela no haya tenido éxito. Pero repito me alegra el fracaso del show, circo o pantomima que se había montado, pero obviamente no me alegra el dolor de las familias colombianas y de todo Colombia. Jean-Paul Prates del blog “Além do Petróleo” tiene dos posts al respecto que recomiendo leer.

La siguiente semana habrá más temas para postear salidos del “Diálogo” entre Gobierno y Prefectos que como ya lo mencione varias veces yo no creo en el Dialogo sino en la Negociación y como le demostró el premio Nobel John Nash, para que haya negociación debe existir un conjunto de opciones en las cuales ambas partes salgan beneficiadas. Si por el contrario las opciones son que uno pierde y el otro gana, la negociación es imposible, y tal cual van las cosas y las posiciones tal parece que el Dialogo entre Plurinacionalistas y Autonomistas será un fracaso.