En septiembre escribía un post “Sucre Ander attack” y en ese entonces nada violento había ocurrido en la Capital. No me retracte en el título de ese post, pues ante la insistencia con el bendito tema de la capitalidad era obvio que no había ninguna otra salida que la que se vivió en el pasado fin de semana. Ante una consigna tan descabellada y nefasta para Bolivia, pero a la vez tan inteligente como para destruir la Asamblea Constituyente, la única salida era la violencia y ahí están los resultados.
La pregunta es: ¿Qué viene ahora? Yo creo que nos estamos acercando al fondo que tarde o temprano iba a llegar. Todo lo que nos pasa es fruto de una guerra política por la que la gente no voto el 2005 aunque el Gobierno siga convencido que si lo es. La gente voto por ideas nuevas, inteligentes, propuestas para superar el racismo, la pobreza, etc. Pero de eso nada, siguen los políticos luchando por ideologías que están obsoletas y tienen tientes extranjeros. Como siempre…copiando cosas de afuera.
La foto es elocuente y refleja un país donde la institucionalidad esta totalmente destruida. Y fue destruida por esa forma de pensar y vivir de la política. Esa mentalidad mediocre de creer que con política se solucionan las cosas se tiene que erradicar de este país, pues eso nos ha llevado a ser los más miserables de Sudamérica. Lastimosamente, como todo, eso va a tener un costo que tendremos que pagarlo durante los próximos años, pero ya es hora que reaccionemos y se de el cambio que todos esperamos.
No se trata de cambiar Presidentes como ya se esta hablando, se trata de poner gente que ante todo imponga la ciencia por encima de las ideologías. Si seguimos pensando que las ideologías nos van a sacar de la mediocridad, estamos fregados y de hecho lo estamos y los muertos seguirán sumando.
Ojala deje de morir gente inocente y que los políticos piensen en Bolivia y no en sus intereses personales. Ya estamos hartos de que se nos hable de la derecha o de la izquierda, háblennos de Bolivia por favor.