El domingo pasado salió en la prensa una separata con las conclusiones a las que se arribaron en la famosa Cumbre Plurinacional realizada en Cochabamba los días pasados. La verdad que después de darle una hojeada a las mismas, quede convencido de que este Encuentro no iba a servir para nada y que como siempre al final se iba a tener un listado de cosas que se deben hacer, similar a las cartas que escriben los niños al Papa Noel.
Y hago la similitud con la carta a Papa Noel, porque si nos acordamos de cuando éramos niños, estas cartitas tenían ciertas características comunes. Primero, uno siempre pide los juguetes de moda, aún así sea un juguete que uno ya lo tiene. Segundo, si hubo algo que uno pidió el año pasado y no le trajeron, lo vuelve a pedir, y tercero mejor es pedir más que pedir menos.
Las conclusiones del Encuentro Plurinacional fueron exactamente así: Un listado de buenas intenciones y de cosas que se debería hacer, muchas de las cuales ya se han hecho en el pasado y que simplemente necesitan una actualización. Cito un ejemplo relacionado con el tema de inversiones, que lo encuentran en el siguiente link:
“Invertir es el mejor camino para generar mayor producción y, por ende, más empleo digno, por tanto, las organizaciones económicas comunitaria, social cooperativa, estatal y privada deben buscar invertir más.”
¿Era necesario hacer este Encuentro para decir esto? Creo que no, lo que hubiera sido interesante es pensar en cuales van ser los incentivos que se van a promover desde el ámbito comunitario, cooperativo, estatal y privado para que haya inversión. Obviamente esto que ya es complicado no va a salir de una reunión con los movimientos sociales, va a salir del análisis y la investigación de gente especializada. Pero en Bolivia a esta gente se la persigue y se la encarcela, como es el caso del Dr. Juan Antonio Morales que valga la oportunidad para recordar que el año 2005 fue elegido como el mejor presidente de Bancos Centrales en Latinoamérica (ver link)
El Papa Noel no existe y por tanto las cartas se quedan en eso, cartas y los niños reciben los regalos en función a las posibilidades económicas de los padres, el problema es que muchas veces se les crea falsas expectativas. Lo mismo va a suceder en Bolivia, muchas expectativas para el 2012 y nada que nos haga pensar que estamos en el camino correcto.
Tuesday, December 20, 2011
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